17 de noviembre

Agricultura Urbana

Integrantes de Greenpeace destacaron el Programa de Agricultura Urbana municipal

Franco Seghezzo y Dani Bravo, miembros de la tripulación del barco Esperanza, visitaron el Parque Huerta La Tablada para interiorizarse sobre su funcionamiento y adquirir productos locales.

Integrantes de la organización ecologista Greenpeace visitaron el miércoles 13 de enero el Parque Huerta La Tablada (Acceso sur, Gutiérrez, Lamadrid y Dinamarca) con el objetivo de conocer el funcionamiento del Programa de Agricultura Urbana (PAU) del municipio y, a la par, adquirir productos agroecológicos para consumo de la tripulación durante la estadía del Barco Esperanza en la ciudad.

Franco Seghezzo, coordinador del área de Agricultura y Alimentos de la agrupación, acompañado del cocinero del buque, Dani Bravo, recorrieron este parque huerta ubicado en la zona sur de la ciudad. Guiados por huerteros y el promotor de la huerta, Rubén Fariña, se informaron sobre la variedad de frutas y verduras que allí se producen, a la vez que aprovecharon para seleccionar productos que consumirá la tripulación del Esperanza.

“Greenpeace conoce ya el trabajo que está haciendo el ingeniero Antonio Lattuca, responsable del programa de Agricultura Urbana en la ciudad, y han venido a comprar aquí a los huerteros que han encontrado una opción de inclusión a través de las huertas orgánicas”, comentó el secretario de Economía Social Nicolás Gianelloni. “Es un orgullo que vengan a Rosario y reconozcan este programa de la ciudad”, agregó.

“Rosario tiene la ventaja de tener una política pública de agroecología urbana dentro de la ciudad y tenemos la suerte de que se están produciendo verduras de estación todo el año y que los rosarinos pueden acceder a estas verduras. En otros lados tienen un precio mayor, aquí se venden a un precio similar a una verdura de estación”, comentó por su parte Lattuca, responsable del programa de Agricultura Urbana del municipio. “Es clave el tema de cómo contribuye esto a la mitigacion del cambio climático por la infiltración, los árboles y también por el cultivo de cercanía porque hoy muchas de las verduras que se consumen aquí vienen de lejos, por lo que poder producirlas dentro de la ciudad conlleva un ahorro de energía muy importante”, aseveró.

“Ahora que se está renovando la gestión estamos apuntando a un crecimiento porque todas las verduras que se producen, se venden. Hay más demanda que oferta. Queremos incluir a más personas, más superficies para que más rosarinos puedan trabajar en el tema y puedan consumir este tipo de alimentos”, concluyó.

“El programa de huertas de Rosario es un ejemplo de política pública a replicar, a mejorar. Esperemos que siga creciendo, que siga teniendo más hectáreas, más huerteros, más producción de alimentos para abastecer a la ciudad de Rosario”, sostuvo Franco Seghezzo de Greenpeace y remarcó la importancia de colaborar con el medio ambiente consumiendo productos orgánicos. “Una parte fundamental del barco es cómo nos alimentamos. Queremos dar el ejemplo y demostrar que tres o cuatro veces por día podemos hacer elecciones que puedan cambiar la situación ambiental de donde vivimos. Que los alimentos que compremos sean locales y que sean ecológicos, libres de agroquímicos”. Además, exhortó a la población a aprovechar la producción de estos sitios: “Los alimentos que crecen en nuestro mismo ambiente tienen las cualidades necesarias para que vivamos allí. Es fundamental que la gente que vive en Rosario venga a comprar a las huertas y que venga a comprar a las ferias donde venden los huerteros”.

Además, para el cocinero del Barco Esperanza es destacable el cambio que se puede lograr desde la alimentación; sostuvo que el consumo de productos provenientes de sitios como el Parque Huerta tiene impacto a nivel comunitario. “En cada puerto al que llegamos tratamos de contactar a los productores locales, cooperativas, granjeros, para que nosotros también podamos tener un impacto positivo en la sociedad y en el ambiente y por supuesto cuidar nuestra salud. Todo lo que es saludable para la tierra, para el planeta, es al mismo tiempo saludable para nosotros”, comentó Dani Bravo, el encargado de seleccionar las hortalizas que cocinará a la tripulación.

El Barco Esperanza de Greenpeace ancló frente a la Estación Fluvial el domingo como parte de la campaña de la organización contra los desmontes y la deforestación. La nave tenía previsto permanecer hasta este miércoles a las 18, para partir hacia Buenos Aires. “La experiencia en Rosario fue muy buena. Tuvimos muy buena recepción, no nos esperábamos tanta gente y ahora esperemos que todo este compromiso replique en los políticos, en los legisladores a nivel nacional para tener una ley de Bosques acorde a la emergencia que estamos teniendo por el cambio climático y las inundaciones”, destacó Franco Seghezzo.

Agricultura Urbana

El Parque Huerta La Tablada es uno de los tantos espacios de producción que forman parte del Programa de Agricultura Urbana a través del cual, actualmente, alrededor de 1.800 rosarinos practican la horticultura y producción de alimentos agroecológicos. De ellos, 250 son productores a tiempo completo organizados en la Red de Huerteras y Huerteros. Las hortalizas que producen son 100% orgánicas y los horticultores cultivan sobre sustratos de compost de alto rendimiento.

El Programa de Agricultura Urbana (PAU) integra a varones y mujeres en la generación de emprendimientos sociales de producción y elaboración de alimentos mediante técnicas ecológicas, destinados al consumo familiar, comunitario y al mercado.